El artículo analiza, desde la política educativa, los proyectos de ley presentados a
tramitación legislativa de dos agendas gubernamentales de diferente orientación, el
primero en el año 2008, bajo la presidencia de Bachelet, asociado a un Gobierno
de centro-izquierda, y el segundo, del año 2011, en la presidencia de Piñera,
correspondiente a un Gobierno de derecha. En ambos proyectos se busca impulsar
medidas pro fortalecimiento de la educación pública estatal chilena. Inicialmente, se
caracteriza el contexto más determinante de estos cambios, a saber, las movilizaciones
estudiantiles de los años 2006 y 2011 que dieron origen a las propuestas legislativas,
relevándose las semejanzas en las propuestas de institucionalidad sub-nacional, o
desmunicipalización, en materia de organización, presupuesto y funciones de las
nuevas entidades locales. A continuación, se abordan aspectos claves omitidos en la
legislación como las implicancias del territorio o la disposición de recursos especiales,
entre otros: una revisión propositiva de sus fundamentos y proyecciones de largo
plazo; análisis de la nueva institucionalidad y su financiación. El artículo concluye con
una explicación de tres áreas que debe abordar una reforma de la educación a nivel
regional, de acuerdo con estudios previos y los agravios expresados y denunciados por
el pueblo chileno.