El presente artículo da cuenta de cuán extendida estaba la alfabetización en Chile a mediados del siglo XIX. A partir de los resultados del primer censo nacional de la República levantado en 1854 y del análisis de sus padrones, es posible reflexionar respecto de cómo el Estado midió las bases sociales de su política educacional. El ejercicio metodológico a partir de dichas estadísticas revela que, desde la perspectiva del Estado, hubo una necesidad política de enseñar a leer y escribir como garantía de una nación civilizada a través de la fundación del sistema de instrucción primaria. Desde la población, cabe preguntarse si esa necesidad tuvo un sustento real en la sociedad. El análisis de los padrones censales revela la inexistencia de una necesidad social por la alfabetización.