En este artículo se exponen los rasgos esenciales del Programa de Filosofía para Niños, mediante un breve relato de su origen y propósito. Enseguida se analizan dos de sus conceptos centrales: “diálogo filosófico” y “comunidad de indagación”, los que permiten dar a conocer la metodología y los principios básicos que explican cómo el Programa desarrolla las habilidades de razonamiento. Luego se discute el rol asignado al profesor, deteniéndose en algunos de sus requisitos fundamentales y en su capacitación. Finalmente, se mencionan brevemente aplicaciones del Programa a la educación para la democracia, realizadas en investigaciones recientes conducidas por la autora.